Exposición ocupacional

-...Iba para mineral milagroso como la energía nuclear, y ha acabado en un enemigo “número uno” de la especie humana...-

 

Fuente: El amianto en España: estado de la cuestión. Ángel Cárcoba, Francisco Báez, Paco Puche, octubre 2011

 

Las características mineralógicas de este material y en concreto de las fibras que lo componen (son invisibles, inodoras e insípidas) favorecen su entrada al organismo. La principal vía de exposición al amianto se produce a través de la inhalación. Otras formas, menos frecuentes, de acceso al organismo son la ingestión y a través del contacto con la piel.

Las características aerodinámicas de las fibras de amianto, (pequeñas y alargadas) facilitan que puedan quedar suspendidas por mucho tiempo y con ello viajar fácilmente por el aire o ser transportadas por otros agentes como las corrientes de agua. Estas fibras también pueden adherirse a la ropa y/o piel, contribuyendo al aumento del riesgo de inhalación y facilitando su entrada en el cuerpo humano.

Además, son prácticamente indestructibles "no se disuelven en agua, no se evaporan, resisten altas temperaturas, el fuego y la degradación por productos químicos y biológicos" por lo que cuando se depositan en el suelo o en algún otro tipo de material, estas fibras pueden permanecer mucho tiempo sin destruirse, aunque sí pueden separarse en un mayor número de fibras más pequeñas, ya que las uniones entre fibras son débiles.

Fuente: Agencia para la sustancias tóxicas y registro de enfermedades (ATSDR). Resúmenes de salud pública- Asbesto (amianto)

 

 

 

 

Las principales fuentes de exposición al amianto pueden ser tanto a nivel ocupacional, como doméstico o ambiental.

La principal fuente de exposición ocupacional es a través de la vía respiratoria, a partir de las partículas suspendidas en el aire del lugar de trabajo. Muchos edificios y otros elementos construidos en fechas anteriores a su prohibición aún contienen elementos de amianto.

En el caso del amianto instalado, los niveles de exposición dependen del tipo de material con amianto (a partir de ahora MCA), del estado en el que se encuentre (los materiales en mal estado pueden liberar fibras fácilmente) y su tiempo de vida útil, por lo que la exposición puede venir, bien porque el aire del interior de edificios contiene partículas de amianto friable, o por la proximidad a un punto de exposición concreto cercano a MCA (como uralita, falso techo, pizarra de tiza, etc.) deteriorado o que ha finalizado su vida útil. O, en algunos casos, por ingestión de agua procedente de tuberías con amianto.

Los trabajadores y/o trabajadoras más afectados por la exposición al amianto serán aquellos que realicen actividades que conlleven la manipulación de los materiales de construcción. Algunas de estas actividades pueden ser el mantenimiento y rehabilitación de edificios en general con materiales friables o en mal estado, el corte en seco de estos materiales con herramientas abrasivas, la instalación y utilización de materiales que contienen amianto (ó MCA) o los trabajos de demolición.

La exposición ambiental podría afectar a aquellos profesionales que desarrollan sus tareas cerca del punto de emisión de amianto, principalmente por exposición al aire cercano a puntos de producción, como fábricas que trabajan con amianto o a puntos de edificación/ reconstrucción/ remodelación de edificios o materiales contaminados con este mineral.

 

 

Cuando las fibras de amianto son inhaladas, pueden permanecer atrapadas en los pulmones, de forma que, a medida que pasa el tiempo la cantidad de fibras en el tejido pulmonar aumenta.

A todo ello hay que sumar la exposición por la liberación de fibras en los lugares de trabajo donde no necesariamente se manipula el amianto y la exposición en vertederos incontrolados.

Además, las fibras de amianto tienen la capacidad de fragmentarse en fibras más pequeñas, aumentando su capacidad de daño a la salud humana, puesto que pueden ser distribuidas con mayor facilidad y entrar en contacto con las personas.

"A la capacidad de desmenuzarse fácilmente y liberar fibras al ambiente se denomina friabilidad

a) El material friable, puede ser disgregado o reducido a polvo con la sola acción de la mano, por ejemplo, como consecuencia de choques, vibraciones o movimiento del aire, etc.

 

 

b) El material no friable, necesita herramientas mecánicas para ser desmoronado o reducido a polvo, no desprenden fibras a no ser que sea por la acción directa de máquinas o herramientas. En el caso del amianto no friable, las fibras están mezcladas con otros materiales, habitualmente cemento o cola".

 

 

Fuente: Fuente: Pág 59. Apéndice 1 “Materiales con amianto”, Guía técnica del INSSBT

La friabilidad de los MCA depende del tipo de material y de su composición. Puede aumentar cuando supera su vida útil o envejece, cuando se rompe o está deteriorado.

Por tanto, puesto que existen actualmente muchos edificios construidos con anterioridad a la prohibición del amianto y materiales, elementos y objetos en los lugares de trabajo en continuo uso por las trabajadoras y trabajadores, muchos profesionales continúan encontrándose con esta sustancia peligrosa en sus tareas diarias y ambiente de trabajo.

Además, la carencia de información y/o concienciación sobre este riesgo laboral puede implicar la manipulación de amianto sin las mínimas condiciones de seguridad y que se trabaje con él sin tener en cuenta el riesgo que supone para la salud.

En materia de seguridad y salud laboral, el trabajo con el amianto instalado está regulado por medio del Real Decreto 396/2006, de 31 de marzo, por el que se establecen las disposiciones mínimas de seguridad y salud aplicables a los trabajos con riesgo de exposición al amianto.

Sin embargo, puesto que la normativa permite la manipulación de materiales con amianto en determinadas situaciones, aquellas tareas en las que el riesgo no es sencillo o posible de determinar pueden ser consideradas “de exposición esporádica de baja intensidad”, lo que puede suponer un riesgo no controlado para las trabajadoras y trabajadores.

Este desarrollo conlleva una situación complicada en cuanto a la seguridad y salud de los trabajadores o trabajadoras que pueden estar sometidos en el lugar de trabajo a exposición de fibras de amianto fundamentalmente por encontrarse en centros de trabajo con materiales que contienen amianto y que su estado de conservación supone, o puede llegar a suponer, desprendimiento de fibras.

 

TAlerta: puede contener Amianto